en un gran peldaño,
se hacía una fiesta para el insecto
más correcto.
Con mucho trabajo,
el escarabajo,hizo un buen agasajo.
Habían jarrones,
a montones,
estaba llena de piqueos la mesa,
y rápidamente se acabó la mayonesa.
Ese año el homenaje,
también celebrado en el garaje,
fue para la avispa,
que como una chispa,
se llenó de polen la piel,
e hizo mucha miel.
por Francisco José Sánchez F.
No hay comentarios:
Publicar un comentario